La Biblioteca Antonio Hilaria, una de las instalaciones culturales y educativas más importantes del municipio, ha vuelto al centro del debate político y social. Esta semana, varios representantes del PSOE local, encabezados por su secretario general Antonio Sánchez, visitaron el recinto tras el creciente malestar de algunos usuarios.
La queja más repetida: los horarios limitados de apertura, que según los usuarios solo se amplían durante cortos periodos del año, dejando a opositores, universitarios y estudiantes de bachillerato sin un espacio adecuado para estudiar de forma continuada. Alberto García Molina, estudiante, sale a exponer la situación:
«Estamos muy enfadados y disgustados con la mala gestión de la concejalía. No solo queremos más horario este mes, lo necesitamos todo el año. Hay trabajadores, hay gente estudiando oposiciones, y la biblioteca es esencial para muchos.»
Pero el reclamo no termina en el reloj. Durante la visita, tanto usuarios como representantes socialistas denunciaron también el mal estado de las instalaciones. Mobiliario deteriorado, climatización ineficiente y una falta general de mantenimiento convierten lo que debería ser un espacio de concentración y cultura en un entorno incómodo e incluso inhóspito.
Desde el PSOE de Rincón de la Victoria acusan al equipo de gobierno de priorizar “las fotos y el postureo político” frente a las necesidades reales de la ciudadanía. En palabras de Antonio Sánchez:
«Una biblioteca no es un edificio con libros, es un pilar para la igualdad y la formación. Si no se cuida, se está abandonando a toda una generación de jóvenes y trabajadores.»
El grupo socialista ha exigido públicamente tres medidas concretas: la ampliación permanente del horario, un plan urgente de mejora y mantenimiento de la biblioteca, y un diálogo abierto con los usuarios para adaptar el servicio a las demandas reales.